domingo, 13 de octubre de 2013

Los abrazos no se piden se dan

Nos educan para pedir, vamos pidiendo de todo, sin buscar en nosotros aquellas cualidades, talentos, que podemos entregar a los demás, así por ejemplo pedimos abrazos cuando podríamos darlos, regalarlos. Tan simple es este hecho pero tan trascendente que un ejemplo de esto es la hindú Amma que va por el mundo repartiendo abrazos y gracias a ello las personas en torno a ella se han organizado para hacer obras caritativas.
Eso que hemos aprendido, consciente o inconscientemente, es una programación muy fuerte que restringe nuestra naturaleza social, nos acostumbran también a vender, no a dar.
Para salir de esa trampa, podemos dar afecto, atención, tiempo acompañando a alguien, etc, no significa que lo único que se pueda dar sea dinero.






No hay comentarios:

Publicar un comentario